Ven, corre, siéntate a mi lado, que vamos a querernos como nunca hemos hecho, vamos a contemplar como las gotas chocan en la ventana, mientras nos envolvemos en miles de abrazos.
A todo esto sumamos unas gotas de locura, donde tú y yo solo tengamos que preocuparnos de que no llevemos nada encima, luego para compensar pasearemos de la mano y tú me harás de rabiar salpicándome con cualquier charco que te pille a tu paso, por que sabes que conseguirás enrabietarme y a ti, eso te encanta.
Pero como conoces todos mis puntos sensibles, sabrás que para consolarme basta con un par de cosquillas, esas nunca fallan, siempre consiguen hacerme reir, y tu detrás.
Porque vamos a querernos como nunca, te advierto de que no te podrás escapar, porque estarás tan enamorado de mi que lo último que querrás es pasar mas de tres segundo sin alguien que te diga lo guapo que estas todos los días del mes, y sin que nadie te susurre bajito que eres un cabrón, pero todo lo arreglare con una sonrisa detrás y a ti eso te volverá loco.
Acabaré conociendo tus virtudes, tus defectos y tus manías y te aseguro que hasta tus defectos me acabaran gustando, porque estaré tan acostumbrada que ya no podré pasar ni un solo día sin ellos, porque lo que para ti sean defectos para mi serán virtudes.
También dicen que la perfección no existe, lo sé pero a ti ese termino te queda pequeño.
A sí que escúchame bien, presta atención cada movimiento que haga, observame detenidamente cada segundo que pases a mi lado, escucha atentamente todo lo que te diga, y sobre todo creetelo, porque no habrá nada, ni nadie en este maldito mundo que te quiera como yo lo hago.