Cuenta una historia de una princesa que para serlo no
necesita corona. Que conoce a su príncipe azul en discotecas y no en fiestas
reales. Porque muchas veces para conquistarla solo hace falta una mirada, un
guiño, una sonrisa o que le hablen al oído. Y en sus manos en vez de una varita
mágica y una rosa lleva un cubata y un cigarro.Que si se le cae el zapato de
cristal prefiere romperlo en mil pedazos y correr descalza. Y si se desmalla no
se derrumba a llorar ,ella prefiere agrandar la sonrisa.¿ Y el hada madrina ?
vale, quizá no puede crear vestidos preciosos pero sabe aconsejarte como de
corto debes llevar la falda para ir perfecta o con que zapatos conjuntar el
vestido. Que si, que es muy distinto al típico cuento, pero hay una cosa que no
va a cambiar nunca. -TIENE QUE ACABAR CON UN BESO
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